Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Mateo 6:33
Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra. Hechos 1:8
Cuando buscamos primero de Dios, PRACTICAMOS SU PALABRA y pedimos de todo corazón la presencia del Espíritu Santo, Dios nos da su Espíritu y con Él recibimos amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe y mansedumbre; después de recibir todo lo anterior Dios comienza a darnos todo lo que necesitamos en el área sentimental, familiar y económica.
Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho. Juan 14:26
El Espíritu Santo es quien nos guía, nos direcciona, nos enseña, nos capacita, nos alerta para no caer en tentación, es decir, con el Espíritu Santo nos aseguramos una vida completa y bendecida aquí en la tierra y la entrada al reino de Dios.