Espíritu Santo

Espíritu Santo

El Espíritu Santo es la tercera persona de la Santísima Trinidad; fue enviado por el señor Jesús cuando ascendió al cielo, para no dejarnos solos.

El Espíritu Santo es quien nos da fortaleza para resistir nuestros problemas, mientras Dios los soluciona.

Es necesario estar en una constante búsqueda del Espíritu Santo, para que ocupe nuestro corazón y así estar protegidos. El Espíritu Santo es quien nos guía, nos enseña, nos capacita en todo para no hacer las cosas erradas y siempre ser vencedores en todo.

El Espíritu Santo nos protege y nos libra de todo mal, nos fortalece para no caer en tentación. 

Pero para recibir el Espíritu Santo de Dios es necesario que nuestros corazones estén limpios de toda inequidad o inmundicia; es necesario arrepentirnos de todo pecado y abandonarlo, perdonar a quienes nos han ofendido y así eliminar todo resentimiento de nuestro corazón, eliminar toda forma de idolatría, pues esta es abominación para Dios.

Conocer la palabra de Dios y sobre todo aplicarla en nuestras vidas, nos asegura una verdadera vida con Dios, y así recibir su protección y salvación.

Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra. Hechos 1:8

Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo. Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare. Hechos 2:38-39